Distinguidas personalidades, con el debido respeto, permítanmebrevemente exponerles este caso.Hace algunos días mi hermana sufrió lo que parece ser un "error" de esosque en México consideramos "atropello" a los derechos fundamentales detodo ser humano: el derecho a ser tratado como tal; experiencia que lesucedió mientras esperaba a ser deportada de Alemania a España. Con la prudencia y discreción que el caso requiere -en lo posible queno se mencione su nombre- y, luego de que ella consultara a autoridadesmexicanas en Madrid, me permito reenviar la carta que presentó alconsulado de aquella ciudad, y anexo la visa correspondiente. Tal vezalguno de ustedes pueda orientarnos.El interés que mueve al que esto escribe es que este tipo de errores,por los cuales debe pagar una mujer, de 21 años, excelente estudiante mexicana, originaria de Arandas, Jalisco, de 1.60 mts de estatura, queviajaba sola...no se repitan.
A quien corresponda:
02 de enero de 2008
Madrid España
... soy estudiante mexicana de la carrera de Negocios Internacionales por la Universidad de Guadalajara (CUCEA), promedio 98.9 y desde septiembre de 2007 realizo un semestre de intercambio en la Universidad Autónoma de Madrid, en la misma Madrid, España.
El pasado 19 de diciembre de 2007, comencé un viaje de navidad aprovechando las vacaciones de fin de año y mi estancia por Europa. El recorrido iba muy bien, conocí alrededor de 5 países, hasta que el día 30 de diciembre el siguiente destino sería Berlín.
Mi vuelo era el 4532 con easyjet, procedente de Budapest, el cual arribó a Berlín entre las 15:00 horas. Al bajar del avión, los pasajeros teníamos que identificarnos en el control fronterizo de seguridad, mostrando nuestra documentación, como en todos los países.
Al ser estudiante internacional cuento con una visa Schengen, (España +1 Trans. 05 Schengen, tipo D; con número de entradas múltiples), por esta razón me atreví a realizar mi recorrido por Europa, además en los 5 países anteriores no tuve ningún problema. Sin embargo, la situación no fue igual en Alemania. Al tocar mi turno para mostrar mi documentación, los dos policías que realizaban el control me pidieron que esperara en una esquina mientras atendían a los demás pasajeros. Escuché que llamaban por teléfono y minutos después vino hacia mí otro policía.
Lo primero que me dijo fue “hay un grave problema con su visa”, para lo cual inmediatamente respondí “no es posible, he estado en otros países y nadie me dijo nada”. El respondió “sabemos que estuviste en otros países pero como ilegal, sígueme…”
Como tengo mi visa y no soy ninguna delincuente, ni tengo nada que esconder, no tuve ningún problema en seguirlo, llegamos a la oficina de policías y he pedido que me permitan recoger mi equipaje. Entonces dos oficiales me acompañaron por mi maleta, comenzaron a tratarme como un delincuente puesto que ahora tenía que estar custodiada en todo momento, la verdad estaba muy confundida no entendía lo que pasaba.
Pedí que llamaran al consulado mexicano para que les comunicaran mi situación y me dijeran que era lo que pasaba, a lo cual me dijeron “esto es paso a paso, debes esperar”.
Al regresar a la oficina fui interrogada por varios policías, de los cuales sólo uno me hablaba en inglés y me trató como un ser humano porque los demás parecía que habían olvidado que era un ser humano. Al parecer nadie hablaba español, y muchas preguntas pasaban por mi mente ¿Qué hubiera pasado de no haber sabido hablar inglés? ¿Cómo era posible que me deportaran, sin hacerme saber los motivos? Ninguna comunicación real hubo durante el tiempo que estuve detenida en Berlín.
Todo el tiempo me llamaron criminal porque me decían que estuve de ilegal. Después de soportar semejantes humillaciones, he pedido que me dejen de llamar así, y que no me trataran como una criminal, he comentado que no es mi culpa, y que sólo estaba en su país como turista para gastar dinero y dejarlo en su país, he mostrado mis reservaciones de hotel, mis billetes de avión, en los que se observaba que solo estaría ahí para recibir el año nuevo y que 3 días después viajaría a Paris y de ahí regresaría Madrid para el inicio de cursos.
Me han dicho, “lo sabemos pero lo que estas haciendo es ilegal, no podemos dejarte quedar, sabemos que eres estudiante”, y comenzaron a contarme todo sobre mí, al parecer habían investigado bastante bien mi expediente. Fuí interrogada por varias horas y después de un rato, por fin me comunicaron con el consulado mexicano. He escuchado que el cónsul pidió que se me permitiera salir al menos por unas horas, lo cual se negaron a aceptar.
Estuve cerca de 20 horas en el aeropuerto de Schoenefeld, sin poder salir ni siquiera de la zona de seguridad, cerca de las 7 de la tarde he pedido salir, comenzaba a sentirme mal, no había comido nada durante todo el día y se los hice saber, ellos me han dicho “eso no será posible hasta que terminemos con todo el tramite, debes esperar”, después de un tiempo de espera, he tenido que firmar la declaración de deportación así como otro papel que según me dijeron era para asegurarse que estaría dentro de esa zona, y que si no lo hacía, me trasladarían a un cuarto sin poder salir porque ahora estaría bajo custodia de la aerolínea en la que seria deportada. Me pidieron permanecer fuera de la oficina de policías. Sin embargo, nunca nadie me dio nada para comer, ni agua para beber y mucho menos algo que me abrigara en la gélida noche. Lo entendí perfectamente, era una delincuente.
Esas horas fueron las más largas de mi vida, puesto que ni siquiera contaba con las condiciones adecuadas para poder dormir como cualquier ser humano normal. Estuve sentada en un banco de metal fuera de la oficina donde me podían vigilar y ahí he pasado la fría noche que calaba hasta los huesos.
Cuando los policías comenzaron a salir de su turno, uno de ellos tuvo la delicadeza de acercarse hacia mí y decir, “México, México, happy new year”, como si aquella fuera la mejor noche de mi vida.
Al día siguiente me comentaron que mi avión despegaría a las 10:00 a.m y me dijeron que porqué me quejaba si viajaría gratis. Como si ese fuera un consuelo después de haber perdido tanto dinero por las noches de hotel que pagué y los billetes de avión por adelantado.
Cerca de las 9:45 a.m han salido dos policías y me han señalado que era hora de partir, me escoltaron como una criminal; pasé por la fila de pasajeros, el policía me entregó la factura de mi billete de avión, y esperó unos minutos a que fuera embarcada. Pude notar que fuera, cerca del avión, se encontraba una patrulla con policías vigilando.
He subido al avión, y al checar la factura, pude percatarme de que esa deportación había sido costeada por mí, puesto que sólo cambiaron el destino de mi siguiente billete de avión de Berlín a Paris, con número de referencia ED1FBR6.
Ahora me pregunto, después de semejantes malos tratos, que hubiera pasado conmigo de haber padecido alguna enfermedad, por ejemplo del corazón, diabetes o algo así. No es posible que en pleno siglo XXI sigan sucediendo cosas de semejante magnitud, no es posible que se le dé un trato como este a ningún ser humano. No cabe duda, que después de lo anterior me acabo de demostrar a mí misma, que hasta en los países más desarrollados, existen tremendas fallas en su estructura política y judicial, para que se cometan errores como los que cometieron conmigo; uno, el relativo a la supuesta irregularidad de mi VISA; el otro, el trato ofensivo, despectivo y abusivo que recibí por parte de las autoridades alemanas.
Considero que como mexicana, mi embajada debe pedir una explicación de lo sucedido y que se aclare. Exijo que se me dé una explicación cortés de lo sucedido y que se me pida disculpas porque fue un error, según me comentó usted mismo el día de ayer, señor cónsul de México en Madrid. En caso de no existir ningún error en mi visa, como considero, exijo también el reembolso de los gastos que la deportación me ocasionó. Para tal fin, anexo copia de las reservaciones y billetes de avión que había reservado.
Sin otro particular, como mexicana, espero lo mejor por parte de las autoridades de mi país en este asunto.
martes, 8 de enero de 2008
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2 comentarios:
Hola que tal,
Acabo de leer tu post y tengo la explicación. Yo también estoy yendo a España como estudiante en setiembre de este año. Creo que en el consulado español en México no te informaron bien. La visa de estudiante española no te permite salir del país. Para hacer eso tienes que tramitar una visa de turismo Schengen, ya que la visa española no es schengen (la de estudios). Efectivamente estuviste ahí de ilegal....
Atentamente,
Rafael
Disculpa, no se supone que los ciudadanos de Mexico no necesitan visa para entrar a Alemania??? Porque necesita una visa de turismo Schengen si puede estar hasta 90 dias en Alemania sin necesidad de visado?
Gracias por orientarme.
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